JUSTICIA Y POLÍTICA

Bordet y la estrategia del Presidente contra la Corte Suprema

03/01/2023

Alberto Fernández convocó a la guerra, pero hay dudas sobre la conveniencia de esa estrategia. Las pruebas de albertismo y el proceso electoral que aún no tiene fecha en Entre Ríos.

Bordet y la estrategia del Presidente contra la Corte Suprema

Federico Malvasio
De la Redacción de Página Judicial

 

Un título ajustado, en el plano de lo político, sería: “Alberto Fernández pasa lista y Bordet no está”. Es que el Presidente recibirá este martes a gobernadores para fortalecer su estrategia de exponer a la Corte Suprema de Justicia de la Nación ante la sociedad, luego de que fallara a favor de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y en detrimento de las demás provincias en el reclamo por la coparticipación. Eso además de la bochornosa relación entre un secretario de Horacio Rosatti y el ministro de Seguridad y Justicia porteño, Marcelo D’Alessandro, en el que se conocieron conversaciones para acordar estrategias judiciales que beneficiarían al Gobierno porteño.

Gustavo Bordet, seguramente, no estará en el encuentro. No está en el país y con inconvenientes en la señal, según se reconstruyó de fuentes oficiales. Se especula entonces que en su lugar asista la vicegobernadora Laura Stratta o que el propio mandatario se conecte por Zoom. Nada está definido.

El gobernador entrerriano se suma a la estrategia de sus pares de la Región Centro, la zona núcleo que tiene a los mandatarios en campamentos distintos: Omar Perotti, cerca de Cristina Kirchner (sin decirlo); y Juan Schiaretti cerca del calor de Juntos por el Cambio, como lo ha estado desde el minuto uno de la creación de la coalición.

Hace exactamente dos años, Bordet era tapa del diario Perfil, al ser entrevistado por Jorge Fontevecchia. En ese reportaje aseguraba que Alberto Fernández debía buscar la reelección.

En el medio sucedió una notable profundización de la interna en el Frente de Todos con el Presidente como la principal pieza de debilitamiento.

La guerra entre algunas facciones del Gobierno nacional y el Poder Judicial pone en dudas el apoyo de la liga de gobernadores, un dispositivo que se ha convertido, con el correr de los meses, en apenas una peña con sede en CFI.

Cada uno de los mandatarios tiene asuntos en la Corte Suprema, por lo que preferirían no entrar en un combate que es para la tribuna, porque los números ya están echados. Menos aún embanderarse detrás de un presidente que no tiene capacidad de fuego ni movilización. Bordet, por ejemplo, espera del máximo tribunal del país una resolución sobre el caso de Cecilia Goyeneche, la procuradora adjunta destituida hace unos meses y que concitó la disputa de poder más importante que la vida institucional entrerriana reconozca en los últimos quince años.

Su posicionamiento en un pedido de juicio político a Rosatti no tendría por qué poner en riesgo la imparcialidad al momento de resolver el caso de Goyeneche, pero ya no se está ante un sistema imperfecto, sino ante una crisis institucional de magnitud. Argentina es hoy lo que era la Brasil de Jair Bolsonaro, con menos violencia y más inflación.

El Poder Judicial, que aparecía como el único al que no lo alcanzaba el descontento generalizado, ya está bajo la lupa social. Una encuesta reciente, que sondea en la zona del área metropolitana de Buenos Aireas, deja los siguientes resultados: solo un 13,3 por ciento de la población cree que el Poder Judicial es independiente. Del estudio se desprende que un 57,8 por ciento se muestra de acuerdo con una reforma que vuelva a la Justicia “más transparente y democrática”.

Juntos por el Cambio quedó del lado de la Corte Suprema al repudiar el pedido de juicio político y hacer silencio ante los hechos revelados, más aún cuando Elisa Carrió tiene una presentación contra Ricardo Lorenzetti por mucho menos de lo que se conoce que ha hecho Rosatti. ¿Qué dirá Lilita del viaje a Lago Escondido y de las conversaciones del secretario de Rosatti asesorando al funcionario porteño?

Bordet jugó sus fichas albertistas la semana pasada, cuando repudió el fallo de la Corte Suprema e instruyó al fiscal de Estado, Julio Rodríguez Signes, a adherir a la revocatoria in extremis contra la medida cautelar dictada por el máximo tribunal en el marco del litigio por el 2,95 por ciento del volumen de impuestos coparticipables a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Punto.

Si el desdoblamiento de las elecciones en Entre Ríos es una decisión muy probable, Bordet seguramente tratará de esquivar escenarios nacionales. La batalla mediática tiene sede en Buenos Aires. Acá, en Entre Ríos, dirá el Gobernador, todo el verano es carnaval.