Cruce

Pagliotto y Mulet le enviaron una carta a los procuradores

23/11/2021

Los abogados explicaron las denuncias que hicieron de casos de corrupción en la provincia y le hicieron saber a los magistrados: “No denunciamos a vuestros asociados por lo que investigan. Los denunciamos por lo que no quieren investigar”.  Un ex diputado radical, en defensa del Ministerio Público Fiscal.

Pagliotto y Mulet le enviaron una carta a los procuradores

De la Redacción de Página Judicial

 

Los abogados que presentaron un jury contra el procurador y adjunta, Jorge García y Cecilia Goyeneche, enviaron una carta a los integrantes del Consejo de Procuradores, Fiscales, Defensores y Asesores Generales de la República Argentina y del Consejo Federal de Política Criminal de los Ministerios Públicos.

Rubén Pagliotto y Guillermo Mulet decidieron poner en autos a los magistrados, luego que éstos, en la asamblea ordinaria anual, la semana pasada, expresaran que en Entre Ríos está en marcha una avanzada contra quienes investigan casos de corrupción.

Los abogados del foro local le hicieron saber a los integrantes de la entidad cada una de las causas que ellos realizaron, precisamente contra ex funcionarios y el ex gobernador para disipar cualquier duda acerca de sus procederes.

“Hemos sido denunciantes de los mayores casos de corrupción acaecidos dentro y fuera de nuestra provincia de Entre Ríos. Además, por si algo faltara, en el mes de febrero de 2016, a dos meses de radicada la primer denuncia contra el ex gobernador y actual embajador en Israel y Chipre, Sergio Urribarri, el doctor Pagliotto sufrió un duro atentado en su estudio jurídico, hecho que fue ampliamente conocido en todo el país por su alevosía y el mensaje mafioso e intimidante que se propusieron inocular sus autores en el tejido social y en todas aquellas personas que se le animan a las mafias y corruptos de toda laya”, dice la carta firmada por los abogados en referencia al ex mandatario y diplomático que está siendo juzgado, en estos días, por la denuncia de los letrados de Paraná.

Y agrega la carta: “Por eso, es de una injusticia e iniquidad manifiestas muchos de los conceptos vertidos por vuestro comunicado fechado el día 18/11/2021, puesto que no seremos jamás nosotros, precisamente, quienes merecemos estas erróneas y destempladas calificaciones. Y decimos más, si no hubiera sido por todas nuestras investigaciones y denuncias prohijadas y presentadas junto a algunos abnegados periodistas de la región, el procurador general no hubiera movido una sola ficha en esta orientación; y nos sobran las razones y las pruebas de tal afirmación. De todas maneras, entendemos y queremos creer que ninguno de ustedes debe conocer cuál ha sido nuestro trabajo en la lucha contra la corrupción en los años previos y los reales motivos que nos constriñeron a pedir la formación de Jury de Enjuiciamiento contra sendos procuradores. Porque si conocieran las abundantes y contundentes pruebas arrimadas, estamos convencidos que este comunicado no hubiera existido o, al menos, no se hubiera aludido elípticamente a los suscriptos”.

En la misiva, Pagliotto y Mulet adjuntan el pedido de Jury y repasan su recorrido en la profesión y en el Estado, como en el caso de Pagliotto, que ha sido fiscal de Investigaciones Administrativas (FIA), presidente de la Sección Paraná del Colegio de la Abogacía y en la actualidad jurado técnico en el Consejo de la Magistratura de Entre Ríos. En el caso de Mulet se inscriben su desempeño en el Consejo de la Magistratura y las denuncias como el caso del jardinero presidencial y el de las “cosechadoras truchas” que el grupo Senor exportaría a Angola.

“Las medias verdades son mentiras edulcoradas y lo que nuestra sociedad espera y exige de los servidores públicos es que cada quien, desde sus obligaciones funcionales, cumplan acabada y honradamente los positivos deberes a su cargo. Sólo eso, pero todo eso. Si conocieran ustedes las causas reales y únicas que nos impulsaron a solicitar el jury de enjuiciamiento a los doctores García y Goyeneche, muy probablemente sostendrían – con toda razón y racionalidad- que ninguno de ellos serían dignos de integrar vuestra asociación o consejo nacional. Tómense el trabajo de leer nuestra denuncia y cotejar las evidencias y pruebas que arropan con sólidos fundamentos las causales de mal desempeño, graves desórdenes de conducta e incumplimiento de obligaciones funcionales que les imputamos a García y Goyeneche”, termina la carta.

Paso seguido le adjuntan la denuncia. Termina el texto: “Que quede muy claro a propios y extraños, que no denunciamos a vuestros asociados por lo que investigan. Los denunciamos por lo que no quieren investigar”.

 

 

¿La Justicia entrerriana en camino de su domesticación total?

 

Por Alberto Rotman (*)

Desde hace años la mayor preocupación de los distintos gobiernos peronistas fue, entre otras cosas, dejar antes de irse, sus espaldas bien cubiertas en la Justicia. Espero que este P.E.P. no siga este camino, manchando más a esa señora de ojos vendados y balanza en sus manos.

Hace tiempo que las Instituciones del Estado están en falta con respecto a lo que la sociedad espera de ellas, entre ellas ve a la Justicia cada día más alejada de sus necesidades reales y con más escepticismo cuando observa las innumerables causas que son archivadas, que prescriben o que demoran años para lograr sentencias.

Nuestra provincia no es la excepción de esta desnaturalización de la Democracia, a pesar de ello, vemos que algunas causas resonantes que involucran a personajes también resonantes y que seguramente incomodan al oficialismo, fueron abiertas por el Ministerio Público Fiscal , estando algunas de ellas en instancia de juicio oral (causa Urribarri), otras con sentencia (causa Allende), otras como la llamada “causa contratos”, se encuentra en la Suprema Corte de Justicia por cuestión de competencia, otras en etapa de investigación (tarjeta Sidecreer), y algunas demoradas por el propio sistema judicial, con recursos excesivos, demoras en la fijación de audiencias, suspensión de estas, chicanas procesales, etc.

Con la modificación del sistema judicial, hoy la facultad de investigar y acusar la tiene el fiscal. El procurador general (jefe de los fiscales) tiene el poder de ratificar o desestimar esta investigación o acusación.

Parece que el poder político de la Provincia sabiendo la función que la Constitución le otorga, quiere tener, antes que fenezca su mandato, un Procurador que sea más permeable a sus intereses. Para ello debe comenzar por descabezar al actual, para luego nombrar a quien el Poder Ejecutivo crea conveniente……. a sus intereses.

Esto aparentemente, ya estaría en marcha a través de un pedido de jury al procurador general y además estarían los votos para abrir otro a la procuradora adjunta. O sea que con el guiño de la política, la Provincia de Entre Ríos se prepara para, nada más ni nada menos, descabezar al Ministerio Público Fiscal.

Hoy el jury está integrado por tres jueces del Superior Tribunal (doctores Carubia, Carbonell y Mizawak), todos ellos nombrados por gobiernos peronistas. Dos legisladores también peronistas y dos representantes del Colegio de Abogados. La sociedad se pregunta, ¿hay alguna duda a qué intereses responderá la mayoría de este tribunal?.

En los corrillos de la Casa Gris y de los pasillos tribunalicios dan por cierto que esta situación sobrepasa los intereses puramente jurídicos. La realidad persigue dejar en claro las consecuencias que puedan sufrir quienes pretendan inmiscuirse en algunos intereses que moleste al poder político. ¿Qué serenidad de espíritu tendrá un Juez cuando deba emitir una sentencia, sabiendo que, si esta no agrada, su cargo corre peligro?

Por último, quiero subrayar que el Ministerio Público Fiscal podría llevar adelante muchas más causas que las que vemos realiza. Son muchos los casos de corrupción que a diario se conocen o sospechan, y muchos de los cuales no llegan a ningún resultado, estoy seguro que su actuación debería ser más productiva.

A pesar de ello, no hay dudas que el pedido de  jury a la cabeza de la Procuración abre las puertas de un nuevo intento de manipular a la justicia, no en beneficio de la sociedad, sino en beneficio de la corporación política de turno.

 

(*) Ex diputado provincial, de la UCR