OPINIÓN

Justicia en tiempos difíciles

08/12/2023

Un jurado popular declaró culpable al policía Mauricio Gómez por el homicidio de Iván Pérez, ocurrido en 2019 en Gualeguaychú. En esta columna, la abogada Lucía Tejera resaltó que “en estos tiempos difíciles, vivimos un día de justicia y celebramos la dicha de insistir colectivamente en actuar en primera persona del plural, de militar y de creer”.

Justicia en tiempos difíciles

Ana Lucía Tejera (*)

 

El jurado llegó a un veredicto. Culpable. Mauricio Gómez, policía de la provincia de Entre Ríos, en 2019 le disparó a Iván Pérez que corría, en cuero y con la remera en la mano, por el barrio Molinari, en Gualeguaychú.

El disparo le dio en la nuca, justo, le destrozó la cara. Lo vimos en las fotos.

El caso llegó a juicio en 2021. Fue por jurados y no llegaron a unanimidad (como requiere nuestra ley) y el juicio quedó estancado. Que se estanque quiere decir que algunos de los jurados consideraron inocente a Gómez y otros, culpable. Sin veredicto. Ni culpable ni inocente.

Hace unos días empezó el nuevo juicio, con nuevo juez y nuevos jurados. Esta vez declaró Rosa, la mamá de Iván, que en el otro juicio no pudo con su pena. Cuando salió dijo que se sentía liviana, que pudo defender a su hijo.

Defender a su hijo muerto, asesinado. Ella sintió que poniendo su cuerpo y recordándolo, lo defendió. Contó cómo era Iván. Y sintió eso porque Iván venía escapando de la Policía; a Iván siempre lo seguía la Policía, hasta que lo mató y en el otro juicio el juzgado fue Iván; juzgaron al muerto, al asesinado. Entonces a Gómez no se le encontró ni culpable ni inocente. Porque, ¿qué hacer con el imputado cuando se construye la víctima culpable?

Hasta este miércoles, en que un jurado popular lo encontró culpable del homicidio agravado de Iván Pérez.

Un jurado popular, ni los de los derechos humanos ni un juez, los del jurado que dicen que la policía no puede hacer lo que quiera, que hay límites, que tiene que haber un resguardo de la vida de todos.

En estos tiempos difíciles, el miércoles vivimos un día de justicia y celebramos la dicha de insistir colectivamente en actuar en primera persona del plural, de militar y de creer.

Lo conseguimos, que ganamos, que es posible creer.

Eso refleja la foto grupal con la familia de Iván, y con las Madres del Dolor que se viajaron todo para estar con Rosa, como Maira Gusmán; con les compañeres de la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación que le pusieron el cuerpo (la militancia y la sustancia); con les compañeres y en el local de Madres de Plaza de Mayo Gualeguaychú, que contienen, orientan y acompañan siempre.

(*) Abogada de la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación, querellante en representación de sobrevivientes y familiares de víctimas de la dictadura en Entre Ríos y representante de la familia de Gabriel Gusmán.