Concursos por venir: Bordet dejará una nueva estructura de control 

30/01/2023

El Gobernador tendrá la posibilidad y la obligación de nombrar a funcionarios en áreas del Estado a los que cualquier dirigente de peso presta atención. Cómo transitó Bordet esos procesos. 

Federico Malvasio
De la Redacción de Página Judicial

 

Gustavo Bordet será, después de Jorge Busti, el gobernador de la democracia moderna que más oportunidades tuvo para cubrir vacantes en áreas sensibles en el Estado. Sensibles, sobre todo, para quienes se desempeñaron o desempeñan en el seno de la administración. 

El mandatario terminará su segunda gestión luego de haber designado cinco vocales sobre nueve que integran el Superior Tribunal de Justicia (STJ): Miguel Angel Giorgio, Martín Carbonell, Gisela Schumacher, Laura Soage y Leonardo Portela. Los pliegos de los dos últimos aún no han sido notificados en el Senado, según se queja la oposición.

El concurso para la Fiscalía Anticorrupción es la otra vacante que se cubrirá este año, luego de que la Legislatura cumpliera con la manda constitucional. 

Paréntesis: los vocales elegidos por Bordet no merecieron ninguna impugnación y los pliegos fueron aprobados por unanimidad en el Senado. La ley de la FA también fue aprobada por unanimidad tras algunos aportes de Juntos por el Cambio. 

Los organismos de control fueron las otras vacantes que se le presentaron al Gobernador. Cuando asumió su primer mandato esperó que el STJ resolviera una impugnación sobre la designación del entonces presidente, Guillermo Smaldone. Una vez resuelta en favor del denunciante, el ex senador radical Juan Carlos Arralde, puso al frente al abogado más antiguo hasta tanto se convocara el concurso. El interinato de Federico Tomas fue consensuado con la oposición. 

Llegó el concurso y los planetas se alinearon para el ex diputado justicialista Diego Lara. También se alineó el tablero de puntajes en una cláusula en donde el único que podía sumar puntos por integrar una comisión en la Cámara baja era el legislador. Esa imperceptible maniobra técnica a medida del candidato para el gran público pasó y el hombre de María Grande se quedó con el premio de presidir el organismo de control. 

En diciembre cesó en el cargo Lucrecia Zuttión, fiscal de cuentas. Asumió la vacante Gustavo Labriola, que venía de desempeñarse como secretario de Hacienda de la provincia. Antes había ocupado ese mismo cargo en la Municipalidad de Concordia en la gestión de Bordet. Quienes lo conocen en el ámbito fue un buen funcionario, además de tener galardones académicos. Se desconoce su profundo conocimiento por el cine, arte al que le dedicó un libro interesantísimo. Minucias que poco interesan a los machos del peronismo. 

La hoja de ruta de Labriola no le indica que sus días finales en la administración sean en la fiscalía de cuentas, sino una vocalía, la que deja José Luis Gea Sanchez. El recorrido de Labriola es muy parecido al de Gea Sanchez, quien fue secretario de Hacienda de Humberto Cayetano Varisco en la Municipalidad de Paraná, luego secretario de Hacienda del menemista Mario Moine y terminó en el Tribunal de Cuentas. 

Los otros dos organismos de control que se aprestan a ser sometidos a concurso para determinar quien los preside son la Contaduría General y la Tesorería provincial. La primera está en manos de Aurelio Miraglio; la segunda de Anabel Corona.

Según información aportada a Página Judicial todo indica que en los próximos meses se convocará a concursos para los organismos porque Miraglio está para jubilarse y Corona es interina. 

Se espera que el año electoral altere la convivencia y acompañamiento de la oposición. Mientras tanto Bordet llega al otro lado del río flotando.