JUSTICIA Y POLÍTICA

Condenaron a Susevich por el desvío fondos de campaña

28/05/2020

El ex titular de la delegación local de Anses recibió una pena de dos años de prisión condicional por haber utilizado para otra cosa los fondos que se había asignado para la impresión de boletas de Cambiemos en las elecciones de 2015. Deberá devolver el dinero y cumplir tareas comunitarias.

Condenaron a Susevich por el desvío fondos de campaña

Juan Cruz Varela
De la Redacción de Página Judicial

 

El dirigente radical Enrique Susevich fue condenado a dos años de prisión condicional (no efectiva) en un juicio abreviado en el que admitió haber utilizado para otra cosa el dinero que el Estado le otorgó para la impresión de boletas en las elecciones de 2015.

Este jueves la jueza Elisa Zilli homologó el acuerdo celebrado entre los fiscales Juan Malvasio y Santiago Brugo y el defensor del ex titular de la delegación local de Anses, Hugo Gemelli.

El ex funcionario aceptó purgar una pena de prisión condicional por el delito de defraudación en perjuicio de la administración pública; también deberá devolver una parte del dinero que se le había otorgado a Cambiemos para la impresión de boletas –ya lo hizo– y tendrá que realizar tareas comunitarias durante dos años por el término de 96 horas anuales.

Concretamente, en su condición de “responsable económico y financiero” de Cambiemos, Susevich recibió dos aportes, por un monto total de 1.642.999,94 pesos, que el Estado le asignó a la coalición electoral. Mediante el Decreto Número 2.892, fechado el 25 de agosto de 2015, se otorgó un “subsidio” de 1.027.687,04 pesos; y a través del Decreto Número3.743, del 9 de octubre, se asignó un “aporte no reintegrable” de 615.312,90 pesos para la confección de boletas para las elecciones primarias y generales del frente que encabezaban Alfredo De Angeli y Juan Carlos Lucio Godoy como candidatos a gobernador y vicegobernador.

El dinero era para ser utilizado exclusivamente en la impresión de boletas en las primarias y en las elecciones generales, pero se le dio otro destino a una parte de esos fondos y eso, a criterio de los fiscales, generó un perjuicio patrimonial al Estado.

De hecho, Susevich también fue condenado en un proceso administrativo en el que el Tribunal de Cuentas lo instó a devolver la suma de 752.999,84 pesos e intereses por haberle dado otro destino a una parte de los subsidios otorgados por el Estado provincial para la impresión de las boletas.

En la rendición de cuentas que hizo Susevich ante el organismo de control se consignó que se habían abonado 750.000 pesos en concepto de “impresión de boletas cuerpo candidaturas provinciales Entre Ríos elecciones PASO 2015” a la firma Ipesa y 140.000 pesos por “boletas electorales intendente Lista 502B” a la firma GEA Impresiones, lo que hace un total de 990.000 pesos. Además, se gastaron 763.174,44 pesos en distintas actividades de campaña que se abonaron entre el 29 de agosto y el 22 de diciembre de 2015: eventos políticos; una encuesta de opinión pública; publicidad gráfica y en televisión; columneros, pasacalles y folletos; artículos de librería y otros.

De la documentación que presentó Susevich ante el Tribunal de Cuentas, como responsable económico financiero de la campaña de Cambiemos, surge incluso que el equipo de campaña gastó 10.174,50 pesos más de los que recibió del Estado.

En la audiencia, que se realizó sin presencia de público –solo las partes, todos con barbijo y marcarillas–, como una medida preventiva en el contexto de la pandemia por el coronavirus (COVID-19). La jueza Zilli le explicó a Susevich los alcances del juicio abreviado, “una salida alternativa a un proceso penal” que implica el reconocimiento del hecho y el ex funcionario aceptó la condena.

La magistrada consideró que “las pruebas permiten afirmar que el hecho efectivamente ocurrió” y homologó el acuerdo que impone una condena de dos años de prisión condicional, que es el mínimo que se prevé para el delito por el cual fue acusado Susevich, dado que el ex funcionario admitió el hecho y devolvió la totalidad del dinero que se había utilizado para un fin distinto que la impresión de boletas.