NARCOTRÁFICO

“Todos se lo disputaban a Celis, todo el mundo lo buscaba”

12/12/2019

Pablo Hernández declaró durante dos horas en el juicio que lo tiene como acusado de haber financiado al narcotráfico. Se declaró inocente pero ratificó el acuerdo entre Daniel Celis y Sergio Varisco. Dijo además que otros sectores políticos se disputaban el apoyo del sindicado narcotraficante.

“Todos se lo disputaban a Celis, todo el mundo lo buscaba”

Juan Cruz Varela
De la Redacción de Página Judicial

 

“Todos se lo disputaban a Celis, todo el mundo lo buscaba”.

El título resume la explosiva declaración del ahora ex concejal Pablo Hernández, en la que afirmó que varias fuerzas políticas se disputaban el apoyo de Daniel Andrés Celis e incluso exhibió fotografías que lo muestran con dirigentes de distintas extracciones.

Hernández rechazó la acusación que lo tiene sentado en el banquillo por haber supuestamente colaborado en las actividades de narcotráfico que desarrollaba Celis. “Es una mentira despiadada”, dijo el ex concejal. También está acusado de haber comprado un kilo de cocaína a un precio de 165.000 pesos para distribuirlo en la campaña electoral. “Es una locura que no tiene nombre pensar que yo puedo tener alguna relación con el narcotráfico; soy una persona de trabajo a la que eligieron 70.000 paranaenses”, acotó.

Durante las dos horas que duró su declaración, Hernández se mostró conmovido, contó que lleva 557 días detenido, insistió en su inocencia y se refirió a la acusación como “una presunción equivocada que ha manchado el apellido de mi familia”.

El ex edil dijo haber conocido a Celis a fines del año 2010, “haciendo política”, y destacó la tarea social y militante que desarrollaba el sindicado narcotraficante a través del Movimiento Vecinalista del Oeste. De esa época data la primera vinculación entre Sergio Varisco, entonces candidato a intendente, y Celis.

Según dijo, dirigentes de distintas extracciones políticas se disputaban el apoyo de Celis en la zona oeste de la ciudad: Varisco, José Carlos Halle, Blanca Osuna; y exhibió fotos donde se ve al sindicato narcotraficante con Varisco, Osuna, Fabián Rogel, Sergio Kneeteman y Roberto Sabbioni; también otra en la que se veía a Osuna, Rosario Romero y Julio Solanas flanqueando a Luciana Lemos, la ex pareja de Celis. “Todo el mundo lo buscaba porque podía apoyar a cualquier proyecto político”, insistió Hernández ante el tribunal oral.

El vínculo se retomó cuatro años más tarde y Celis nuevamente apoyó la candidatura de Sergio Varisco, esta vez bajo el rótulo de Cambiemos.

“En 2015 no había ningún juez y ningún fiscal investigando a Celis; no tenía ninguna causa abierta en la justicia”, subrayó Hernández. Incluso el propio Celis se jactaba de ello en las conversaciones telefónicas que mantenía con el ex edil.

Celis dijo hace unos días que aportó fondos a la campaña y, entre otras cosas, mencionó una cena organizada con los candidatos en el Club Avenida Ejército, de la que participaron Josefina Etienot, Emanuel Gainza y otros candidatos de Cambiemos en Paraná, junto con la entonces candidata a diputada nacional porteña Cornelia Schmidt. “Estaban todos contentos; le tomaron la gaseosa, le comieron el pollo y habrán tomado alguna cerveza, pero nadie le recriminó nada a Celis”, exclamó Hernández, que admitió haber concurrido a ese encuentro en caracter de invitado.

El acuerdo político, según dijo, consistió en “invitar a Celis a sumarse al proyecto (de Varisco) para solucionarle los problemas a la gente y atender las demandas para que la gente viva mejor; no hubo ningún acuerdo para financiar el narcotráfico, nunca se habló de cargos ni se le pidió un peso a Celis” y agregó: “Era un acuerdo para trabajar en política y el Movimiento Vecinalista del Oeste organizaba actos, cenas, colgaba pasacalles; pudo haber colaborado con mercadería para ayudar a la gente, porque lo que Celis quería era que cambie el gobierno y así poder mejorarle la calidad de vida a la gente y los problemas en la zona donde vivía”, enfatizó Hernández.

“Nadie sospechaba que Celis podía tener algún problema a futuro con la justicia”, insistió.

De todas maneras, enfatizó que “nunca existió droga en el municipio” y desmintió un mensaje de voz en el que Griselda Bordeira le decía “si hay alguien que nos metió en el quilombo fuiste vos, porque ¿te acordás cuando fui y te dije, dejá de romper las pelotas con Celis que es narcotraficante y nos va a llevar puestos a todos?”. La respuesta fue simple: “Yo nunca llevé droga al partido, nunca llevé nada”.

Veinte mil razones

En su declaración, Hernández también se refirió al vínculo que tuvo con Luciana Lemos y admitió haberle entregado 20.000 pesos –ella dijo que recibió 30.000 pesos de manos del entonces concejal– porque vio en ella a “una madre desesperada”.

En la declaración que dio ante el juez de instrucción, Lemos contó que el 27 de abril de 2018, en horas de la mañana, se presentó en la Municipalidad, cumpliendo órdenes de Celis, para reclamar esa deuda y que Bordeira le dijo que volviera a la tarde. Así lo hizo. “Volví a las seis de la tarde a la Municipalidad y Pablo, que era el que traía la plata, llegó como a las nueve de la noche. Entre esa espera, Bordeira hizo video-llamadas con Daniel Celis y yo me volvía loca porque no sabía si se odiaban o se querían, porque al final hablaban como si nada por teléfono. Bordeira se reía de los mensajes de Daniel Celis, de cómo me amenazaba, y ellos charlaban como si fueran grandes amigos. Ahí Bordeira me dio 10.000 pesos y Hernández traía 30.000 pesos”, contó Lemos.

Hernández negó haber estado reunido con Lemos y Bordeira en la Municipalidad, pero admitió que le dio 20.000 pesos “a una madre desesperada” y que lo hizo “porque tal vez podía llegar a tener algún problema”.

Luego dijo que haberle dado ese dinero “resintió” su economía porque lo necesitaba para pagar el alquiler del departamento donde vivía con su familia y debió sacar un crédito para poder hacerlo. Pero que lo conmovió la historia que le contó Lemos acerca de que “Celis estaba lastimado en (la cárcel de) Federal y ella tenía que llevar a sus hijos a verlo y comprarles ropa” y agregó: “Nada me hacía pensar que Lemos tuviera relación con el narcotráfico” y negó haber financiado el comercio de drogas con plata suya o de otros.

Un amigo para Celis

También declaró el agente de tránsito Alan Nicolás Viola, acusado de haber sido una suerte de correo entre Varisco y Celis, circunstancia que negó de plano.

Viola es empleado municipal desde 2008 y dijo haber conocido a Celis en 2016, cuando éste inició su carrera para conducir los destinos del sindicato de trabajadores municipales. “Tenía una propuesta diferente, contenedora”, señaló el agente de tránsito.

Según dijo, la relación entre ellos se volvió personal cuando Celis lo ayudó a sobrellevar la enfermedad de su padre y el empleado municipal sintió la necesidad de retribuírselo cuando el sindicado narcotraficante, ya detenido, le refirió “que la estaba pasando mal”. Entonces intermedió ante su jefe inmediato, el entonces titular de la Secretaría de Seguridad Comunitaria, Ricardo Frank, “para ayudarlo”.

Frank le dijo que intentaría ayudar a Celis, pero luego le refirió que “ese tema lo manejaba Pablo Hernández.

Sin embargo, aclaró: “Nunca recibí dinero de ningún funcionario para llevarle a Luciana Lemos”.