SOLICITADA
No hay “Ne Bis in Idem” para Rossi
17/11/2019
El abogado Carlos Guillermo Reggiardo, defensor de Domingo Daniel Rossi, intendente electo de Santa Elena, publica a continuación una solicitada en la que cuestiona el accionar de la Procuración General en la causa de su defendido.
SOLICITADA
Domingo Daniel Rossi es sin dudas uno de los políticos que más se ha nombrado en la política entrerriana, su pueblo lo eligió en 6 oportunidades para ser intendente y fue el primer vicegobernador peronista de la democracia. Esa carrera envidiable para cualquier dirigente se contrasta con los problemas judiciales, que desde el año 1997 lo han ocupado, ha tenido que batallar incluso hasta llegar a tribunales internacionales como la CIDH, organismo que en una resolución sin precedentes abrió la causa por la que fue condenado en 2006.
El principio de “Ne Bis in Idem” es un principio procesal que está garantizado en el artículo 1 del Código de procedimientos de la provincia, establece que nadie puede ser juzgado dos veces por el mismo hecho. Este principio tiene jerarquía constitucional, pero evidentemente para Jorge Amilcar Luciano García, Daniel Rossi no goza de esa garantía.
Curiosamente las desventuras judiciales de Daniel Rossi coinciden con abrumadoras victorias en las urnas, quizás hoy que está en debate los jurados populares los fiscales deberían preguntarse porque la gente sigue eligiendo a Rossi y no le cree al sistema penal entrerriano. En 2003 sin respetarse el Juez natural fue procesado por un juez que el mismo STJER confirmo que había cometido un ilícito en el expediente; en 2007 en tiempo récord fue condenado sin derecho a revisión por un tribunal presidido por García por un supuesto enriquecimiento de U$$ 5.000.000 (luego de que durante todo el juicio el fiscal hablara de cifras astronómicas sin ningún fundamento); en 2011 el mismo García ya como procurador sostuvo que aun siendo habilitado por ley no debía ser habilitado; y en 2019 se lo está investigando por construir un 26% más de cuadras en una obra y por un supuesto enriquecimiento de U$$ 300.000 (cada vez más se achica la cifra). En todas las fechas mencionadas Rossi fue electo Intendente de su ciudad. Curiosamente en su momento de mayor tranquilidad judicial perdió la elección ante un ignoto dirigente que venía de sacar fotocopias en el Senado y amaso una fortuna inexplicable, cuya causa duerme el sueño de los justos en los despachos de García y de uno de sus soldaditos de La Paz.
El pueblo se puede equivocar una vez, dos, pero no seis, Rossi sigue siendo electo porque en cada gestión ordeno el municipio, privilegio la obra pública, hubo avances en su pueblo que ningún sucesor pudo igualar. Esto quizás explica como el autodenominado “Súper Procurador”, una especie de “Eliot Ness” del subdesarrollo, no pueda entender como una persona que tiene apuntado con el índice siga como a cigarra resurgiendo en cada elección. García no soporta como su “Fallo” sea revisado por el máximo órgano judicial internacional, y sea el estado argentino el que deba dar explicaciones por la condena de Rossi en 2006, y muchísimo más grave es que en 2019 se lo pretenda volver a juzgar por el mismo hecho. No se necesita ser ni estudiante de derecho para darse cuenta que el patrimonio de Rossi no es ni por asomo el que la condena ya le había atribuido y la CIDH luego de años de estudio ha revisado.
El sistema Penal entrerriano fue hecho a medida de un funcionario que llego por el dedo de la política a ocupar un cargo que ha ejercido con despotismo y autoritarismo, desparpajo y hasta oscuros manejos de fondos reservados y pagos de cuentas propias con dineros públicos. Ni siquiera el presidente más exitoso del STJER de los últimos tiempos, o al menos quien deja una impronta propia y ha mejorado sustancialmente el servicio de justicia en la provincia pudo con el fuero penal, y casi en soledad ha marcado públicamente muchas de las falencias. Los Jueces de Garantía sufren los atropellos de fiscales que creen que todo es posible bajo el ala protectora del súper Procurador, los fiscales que concursan o son reacios a mandatos del “Jefe” son apartados a “causas menores”, y los interinos son soldados al servicio de quien hoy, a diez años de su código a medida, solo puede jactarse de haber metido preso a un perejil, y condenar a un funcionario por hacer una escuela y otro por haberle dado luz pública a un partido político para un acto con un perjuicio estimado en menos de $100 (cien pesos).
Este sistema penal no puede explicar cómo se perdieron 2.000 millones de pesos de la Legislatura, causa que nosotros denunciamos meses antes que explote y los fiscales archivaron en tiempo récord. Para García, Rossi tiene que saber por ejemplo como un ingeniero de obra pública pero responsabiliza del desfalco más grande de la historia a un puñado de perejiles que obviamente no pudieron hacerlo sin la anuencia de sectores de la política. Quizás Rossi por decir lo que piensa y no haber conformado jamás ninguna comisión de aplausos de ningún líder, paga el precio de cumplir 22 años en la parrilla, ocupando tapas y noticias rimbombantes mientras nuestra provincia ha sido saqueada desde las cajas negras como el Iosper.
El sistema cruje por todos lados, la gente se dio cuenta, el rey sigue desnudo y parece ser el único que no se ha dado cuenta, solo un pasquín digital banca su accionar, mientras por ejemplo un abusador camina por las calles, gracias a sus vínculos, habiendo sido procesado por pedófilo. En ese estado de cosas García gasta energía, dinero y quiere juzgar a Rossi, dos veces por el mismo hecho.
Carlos Guillermo Reggiardo.