Apelaron el procesamiento de Varisco

25/06/2018

De la Redacción de Página Judicial Los defensores del intendente Sergio Varisco presentaron este lunes la apelación al auto de procesamiento dictado hace unos días por el juez federal Leandro Ríos, por la presunta vinculación del jefe comunal con la organización narcocriminal encabezada por Daniel Andrés Celis. El abogado Rubén Pagliotto, uno de los defensores


De la Redacción de Página Judicial

Los defensores del intendente Sergio Varisco presentaron este lunes la apelación al auto de procesamiento dictado hace unos días por el juez federal Leandro Ríos, por la presunta vinculación del jefe comunal con la organización narcocriminal encabezada por Daniel Andrés Celis.

El abogado Rubén Pagliotto, uno de los defensores de Varisco, formalizó la presentación de la apelación ante el magistrado, que ahora debería girarla ante la Cámara Federal de Apelaciones de Paraná.

El juez procesó al intendente Sergio Varisco por haber supuestamente aportado recursos públicos a la organización narcocriminal encabezada por Tavi Celis y por eso también le achacó el delito de peculado. En su consideración, había un acuerdo comercial que contemplaba el financiamiento de actividades de narcotráfico, pero también la compra de cocaína a precio diferencial por parte de funcionarios municipales para su distribución en Paraná, Concordia y, eventualmente, Nogoyá en la campaña electoral para 2019.

En su escrito de apelación los defensores aseguran que “jamás existió ningún tipo de acuerdo entre Sergio Fausto Varisco y Daniel Celis”, aunque admiten que el jefe narco participó de algunas reuniones políticas en los comienzos de la campaña electoral de 2015, previo a las elecciones, tal como lo admitió el propio intendente en un reportaje televisivo.

En su apelación los defensores de Varisco también pretenden rebatir las consideraciones del juez Ríos a partir de una interpretación diferente de las escuchas telefónicas: dicen que Celis reclama por el dinero que habría aportado para la campaña electoral de 2015.

Según dicen, “los reclamos de Celis nada tienen que ver con el narcotráfico, sino con lo que él sostiene (que) había gastado en la campaña electoral” y advierten que el reclamo “era para el sustento de su núcleo familiar”, de acuerdo a lo que se desprende de conversaciones que Celis mantuvo con otros integrantes de su organización.

También sostienen que “lejos de existir un ‘acuerdo’, se trataba de una exigencia realizada bajo la forma de amenaza por parte de Celis” y el objeto de esa amenaza, aseguran, era el concejal Pablo Hernández, a quien le exigía que le concediera un contrato a su ex pareja, Fernanda Orundes Ayala.

Los defensores se apoyan en un mensaje de texto que Celis envía a Hernández:
–Yo que necesito es cerrar algo con vos loco, cerrame el contrato de Fernanda. Si no se puede para ella, se lo vamos a dar para otra persona para que lo cobre; y lo mío, loco, lo mío, loco… necesito que cierren lo mío. Vos sabes muy bien, Pablo, lo que yo hice por vos: ocho años estuve prestándote plata, boludo, ocho años bancándote en todas, en las buenas y en las malas y yo no merezco que me hagas esto a mí, ni mucho menos a mi gente. Yo lamentablemente ya estoy hasta las pelotas, me entendés, me da lo mismo. Cambiaría la situación si vos arreglás lo mío… Caso contrario, la gente ya está en el hotel, con las cámaras, con todo. Es lo último que hablo, viejo, no hablo más, nos estamos viendo un abrazo… mi gran amigo.

En la interpretación de los defensores, se trata de “una deuda de carácter personal” que Hernández tenía con Celis; incluso plantean que no es un “compromiso” sino una “obligación” y que Varisco no tiene nada que ver con ello; más aun, aseguran que “no existe a lo largo de todo el expediente ningún tipo de prueba, ni siquiera por inferencia, de que estas comunicaciones fueran conocidas por Varisco”.

Los defensores también hicieron hincapié en la existencia de pruebas sobre las “extorsiones” hacia el concejal Hernández, la policía provincial Griselda Bordeira y el empleado municipal Ernesto Ramón González.

Por otra parte, sostuvieron que entre las anotaciones realizadas por Varisco y analizadas por los investigadores “no hay una sola mención a vinculación alguna al negocio del narcotráfico”.

También señalaron que en el expediente existen cientos de horas de escuchas telefónicas y miles de mensajes de texto analizados, pero “no hay tan siquiera una conversación, mensaje o documento que haga referencia a alguna de esas anotaciones que se encontraron en los papeles privados de Sergio Varisco”.