Por una insólita situación, cuarto intermedio en el juicio a Alanis

08/03/2018

Juan Cruz Varela De la Redacción de Página Judicial El juicio al ex vicegobernador Héctor Alanis entró en nuevo stand-by a raíz de la excusación del juez Rafael Cotorruelo, que integra el tribunal que tiene a su cargo el debate, por haber intervenido antes en otra causa que involucra a Maximiliano Alanis y que se

Por una insólita situación, cuarto intermedio en el juicio a Alanis


Juan Cruz Varela
De la Redacción de Página Judicial


El juicio al ex vicegobernador Héctor Alanis entró en nuevo stand-by a raíz de la excusación del juez Rafael Cotorruelo, que integra el tribunal que tiene a su cargo el debate, por haber intervenido antes en otra causa que involucra a Maximiliano Alanis y que se acumuló al expediente donde se investigan hechos por corrupción.

El motivo por el cual Cotorruelo solicitó ser apartado del juicio es, por lo menos, insólito.

Maximiliano Alanis, además del desvío de fondos públicos, está acusado por estafas reiteradas. Confesó ambos hechos en un juicio abreviado y sería condenado a tres años de prisión condicional y el pago de 30.000 pesos en concepto de reparación a las víctimas.

Pero surgió un problema.

Entre septiembre y diciembre de 2008, Alanis y Víctor David Taglioretti orquestaron una estafa que consistía en el ofrecimiento a empresas y transportistas de Paraná y Santa Fe de créditos del Banco Nación, con la intermediación de una mutual, para la compra de camiones Volkswagen, a pagar en sesenta cuotas sin interés y que comenzarían a abonarse a los seis meses de retirado el vehículo de la fábrica. La operación se concretaría a través de Fernando Gabriel Felli, que se dedica a la venta de acoplados y semirremolques a particulares. Para acceder a los créditos, los interesados debían hacer una entrega de 5.000 pesos para la habilitación y la firma del contrato de prenda, 4.600 pesos para el patentamiento y otros 5.000 pesos para retirar el camión de la fábrica. En total, vendieron 102 camiones y obtuvieron, aproximadamente, 622.000 pesos de decenas de damnificados. Pero la estafa quedó al descubierto el 6 de enero de 2009, cuando los compradores se presentaron en la fábrica de General Pacheco, provincia de Buenos Aires, y les dijeron que no había ninguna entrega pactada.

Una vez detectada la estafa, Alanis se presentó en los tribunales para denunciar el ilícito, pero se presentó como víctima, con la intención de desviar la investigación.

En esa causa, Cotorruelo intervino como fiscal e hizo el pedido de avocamiento de la causa, es decir, consideró que había elementos para abrir una investigación y así se lo solicitó al juez de instrucción. Por ese motivo, dice ahora, no podría suscribir un juicio abreviado para condenar a Maximiliano Alanis y, entonces, pidió ser apartado.

Ante esta situación, que podría significar una nueva suspensión del juicio al ex vicegobernador, los fiscales Alejandro Cánepa y Patricia Yedro plantearon la opción de sostener el juicio abreviado respecto del hecho de corrupción y retirar el acuerdo por la estafa con la venta de camiones, que sería presentado ante otro tribunal en los mismos términos. El planteo fue acogido por los defensores Julio Federik y Leopoldo Lambruschini.

El tribunal difirió su decisión hasta el lunes. Gervasio Labriola y Gustavo Pimentel tienen la última palabra.

yedro-garcia-canepa.jpg