“No esperaba ser demonizado por algún integrante del Ministerio Público Fiscal”

07/07/2017

De la Redacción de Página Judicial De la Redacción de Página Judicial “Es injusta, infundada pero muy funcional”. Esa es una de las interpretaciones que hizo Sergio Urribarri en su perfil de Facebook luego de que trascendiera su imputación que estaba decidida antes que declare Jorge “Corcho” Rodríguez y Pedro Báez. Incluso antes de que


De la Redacción de Página Judicial

“Es injusta, infundada pero muy funcional”. Esa es una de las interpretaciones que hizo Sergio Urribarri en su perfil de Facebook luego de que trascendiera su imputación que estaba decidida antes que declare Jorge “Corcho” Rodríguez y Pedro Báez. Incluso antes de que presentara una nota para ponerse a disposición del Ministerio Público Fiscal.

“Convierten un prejuicio político en una imputación penal”, enfatizó el ex gobernador en referencia a los spots publicitarios por los que se lo acusa de haber utilizado para su campaña presidencial. Los mismos fueron pagados con fondos destinados a la Cumbre del Mercosur.

“Escuchamos todos, todos los días por la radio, la televisión y las redes sociales avisos institucionales de todos los gobiernos nacional, provinciales y municipales, invitando a visitar lugares, contando lo que han hecho, cómo han supuestamente cambiado ciertas realidades. Sin embargo por ese mismo tipo de avisos, ligados y en ocasión del evento político institucional más importante de la historia de esta provincia como lo fue la Cumbre del Mercosur con las presencia de seis presidentes en la ciudad de Paraná, yo he sido imputado penalmente”, cuestionó el presidente de la Cámara de Diputados. Y aseguró que “está probado que todos los aspectos legales de la emisión de esos avisos están debidamente fundamentados y respaldados: ley de la Legislatura provincial, aprobación previa de la Contaduría General de la provincia para los gastos, e intervención de los demás organismos de contralor”.

Urribarri reconoció que “los avisos existieron” y que “su emisión debidamente certificada por los canales a precios razonables del mercado nacional”, pero que lo que “se objeta es el contenido”.

Enseguida cargó contra los fiscales de la causa, Santiago Brugo y Alejandro Cánepa. “Argumentan que los avisos relatados por mí –tal como los que hoy protagonizan el presidente, la gobernadora de Buenos Aires y el jefe de gobierno de CABA, supuestamente formaban parte de mi campaña presidencial. Es decir, que ‘interpretan’ y ‘opinan’ sobre un contenido comunicacional y sobre esa interpretación u opinión impulsan una investigación penal que más allá del disparate jurídico que constituye –dice Urribarri en su muro- claramente tiene el objetivo estigmatizarme, perseguirme y escarmentarme”.

“Sólo hay que ver los avisos. Son institucionales. En ellos se habla de seguridad, de tecnología, de la cumbre, educación y de una conclusión sobre el evento”, señaló y puso los links en el reservorio Youtube:

https://www.youtube.com/watch?v=mV_Enzsa0C8&spfreload=5
https://www.youtube.com/watch?v=NAIjFG1afq4
https://www.youtube.com/watch?v=4-ERres256Y
https://www.youtube.com/watch?v=jd86giv69nk

Urribarri dijo que no fue él quien solicitó la realización del evento, sino que entendió que “así opinaron muchos entrerrianos en su momento, que la decisión de hacerlo en Entre Ríos era un reconocimiento del Estado nacional a la transformación de una provincia que podía mostrarse, al país y la región, como un ejemplo de superación”.

El presidente de la Cámara de Diputados sostuvo que “violenta entonces cualquier garantía que un ciudadano –al estilo de las listas negras de la dictadura- pueda ser acusado por el poder público por una ‘interpretación’ de contenidos comunicacionales, porque no gusten, porque sean ‘inadecuados’. Deberían acusar de oficio entonces –desafió – al gobierno nacional por haber usado el color amarillo, a otros por el color naranja, por los relatos en el fútbol, por las ciudades como Paraná que supuestamente están ‘De pie’ por acción de un intendente y por toda la comunicación oficial de los últimos 30 años en Entre Ríos y en la Argentina”.

“Solamente esto prueba que la imputación es un ridículo” enfatiza Urribarri. “Lousteau acaba de denunciar que Rodríguez Larreta utiliza 4 millones de pesos por día en publicidad oficial de la que él mismo participa y no pasa nada”, abundó el presidente de la Cámara de Diputados.
Al hacer una contextualización de los sucesos Urribarri expresó: “Mi intento presidencial, ‘El sueño entrerriano’ fue efectivamente una iniciativa política que reflejaba el por entonces ascenso de Entre Ríos en la escena política nacional y que de concretarse redundaría en un innegable beneficio a los entrerrianos. Sin embargo, aunque no fue exitoso, permitió generar posicionamientos dentro del oficialismo que garantizarían una importantísima inserción en un eventual futuro gabinete. Y habida cuenta de los resultados electorales, se estuvo a apenas un punto y fracción de alcanzar tal objetivo”. Se refería a su eventual rol de ministro del Interior en un eventual gabinete de Daniel Scioli que perdiera el ballotaje con Mauricio Macri.

Más adelante, se quejó de tener “la mala suerte de que ese intento político legítimo, de los que ha habido decenas en todas las provincias de la Argentina a lo largo de las últimas décadas, haya sido demonizado por cierta prensa y por algunos políticos arribistas. Lo que no esperaba era que también fuera demonizado por algún integrante del Ministerio Público Fiscal a través de imputaciones inconsistentes a sabiendas del efecto denigrante que estas tienen cuando son manipuladas en los titulares de la prensa”.

Y reiteró: “No hay problemas legales ni administrativos con los avisos. Lo que se cuestiona, lo que molesta es ‘el contenido’ tal como subjetivamente lo interpreta el MPF. Entonces, como el contenido no cuadraría argumentan que Urribarri cometió peculado con el dinero, es decir se lo llevó a la casa. Tienen un prejuicio con el contenido y en función de él encaminan una acusación. Un delirio”.

Finalmente el ex gobernador afirmó: “Esta imputación, por este motivo de los avisos de la Cumbre del Mercosur, no tiene fundamento jurídico ni razonabilidad. Reitero, quieren denigrarme, escarmentarme; y conmigo a todos mis colaboradores. También advierto que todos estamos en peligro, si los ciudadanos podemos ser acusados por la interpretación de los contenidos que producimos. Los fiscales han convertido un prejuicio político personal en una acusación penal”.