Cayó en Corrientes el proveedor de droga de los empleados municipales

28/03/2017

De la Redacción de Página Judicial La Policía detuvo este lunes en la localidad correntina de Curuzú Cuatiá a quien sería el proveedor de la banda narco que había sido desarticulada a principios de marzo en San José de Feliciano, luego de casi un año de investigación por parte de la Dirección Toxicología. Se trata


De la Redacción de Página Judicial

La Policía detuvo este lunes en la localidad correntina de Curuzú Cuatiá a quien sería el proveedor de la banda narco que había sido desarticulada a principios de marzo en San José de Feliciano, luego de casi un año de investigación por parte de la Dirección Toxicología. Se trata de Sergio David Molina, cuyo domicilio había sido allanado tras la interceptación del camión que transportaba 252,9 kilos de marihuana.

Según indicaron fuentes policiales, Molina fue detenido por efectivos de la Dirección Toxicología, luego de varios días de realizar tareas de inteligencia en la provincia de Corrientes. En el procedimiento también se secuestró dinero en efectivo, teléfonos celulares y anotaciones que podría echar luz sobre operaciones de venta de marihuana.

Unas horas después, Molina ingresó a la Unidad Penal Número 1 de Paraná.

El 7 de marzo pasado, después de casi un año de investigación, se produjo una espectacular persecución policial hasta lograr la detención de un camión que transportaba 252,9 kilos de marihuana procedente de la localidad correntina de Curuzú Cuatiá. A bordo del camión iba Juan de la Cruz Moreno, ex policía provincial y hermano de la intendenta de Feliciano, Silvia Moreno (PJ). Ese procedimiento derivó en 16 allanamientos que se concretaron en Paraná, Nogoyá y en la vecina provincia, en los que fueron detenidas 12 personas, entre ellas, quienes serían los líderes de la organización.

Sin embargo, Molina había logrado escapar y los policías que llegaron hasta su casa encontraron alrededor de 200.000 pesos, que era parte del dinero que le habrían pagado por la provisión de los 252,9 kilos de marihuana a la banda.

De arriba hacia abajo

La estructura delictiva estaba integrada por distintas células, cada una con niveles de responsabilidad diferenciados.

Le llevó casi un año a la Policía de Entre Ríos desarticular esta banda. Se realizaron seguimientos, filmaciones, fotografías y escuchas telefónicas que permitieron reconstruir al detalle la estructura de la organización. Así se pudieron determinar los roles de los integrantes, establecer que operaba por células, que ejercía altos niveles de violencia y que tenía vendedores en barrios de Paraná, pero extendía sus redes a otras localidades.

En la punta de la pirámide estaba Hugo Alejandro Ceola, amigo, mano derecha y sucesor de Gustavo Petaco Barrientos como líder de la Barra Fuerte, como se denomina la barrabrava de Patronato. En la estructura narco, Ceola estaba secundado por su hijo Cristian Alejandro, alias Conejo, que era como una especie de asistente.

La sospecha es que desde abril de 2016, aproximadamente, Ceola dirigía una banda que comercializó marihuana de manera conjunta y organizada en diversas cantidades. En esa estructura cada uno de los eslabones asumía y ejercía diversas funciones de organización, distribución, aprovisionamiento, almacenamiento, guarda, fraccionamiento y venta al menudeo en distintos consumidores en barrios de Paraná y Nogoyá.

La punta de la cual empezaron a tirar los investigadores fue la detección de una célula abastecida por Ceola en Nogoyá, con cierta independencia, liderada por Diego Orcellet, hijo de un viverista de la ciudad que tenía una pequeña organización dedicada a la venta al menudeo.

Quien conseguía la marihuana era Horacio Enrique Viggiano, alias Cachete, detenido el mismo día en que se interceptó el camión cargado con la droga en San José de Feliciano, junto con su hermano Héctor Guillermo –que dice ser gremialista de la Dirección de Obras Sanitarias–, a bordo de una camioneta Renault Sandero que oficiaba como escolta.

Cachete Viggiano se dedicaba a los asaltos violentos, hasta que ingresó en el negocio de la droga a mediados de la década del noventa y llegó a ser uno de los jefes del narcotráfico en Paraná y alrededores; hasta que en agosto de 2008 fue detenido luego de que la Policía de Entre Ríos interceptara un cargamento de 230 kilos de marihuana que sus lugartenientes transportaban a través de la Ruta Nacional 12, en una modalidad similar a la que se detectó a principios de marzo. Viggiano terminó condenado a siete años de prisión.

Precisamente Viggiano fue quien contrató al ex policía Juan de la Cruz Moreno para que realice el transporte de la marihuana desde Curuzú Cuatiá.

Una vez en la provincia, la droga se repartía en distintos lugares para su almacenamiento.

Los almacenadores de la droga que recibía Ceola eran Carlos Bernini, alias Carloncho, empleado de planta de la Secretaría de Planificación e Infraestructura de la Municipalidad de Paraná, aunque actualmente a cargo de la Dirección de Arquitectura Social de la Municipalidad de Paraná; y Sergio Pross, también empleado municipal. En el caso de este último, intentó despegarse aduciendo que es consumidor.

Nogoyá, donde todo comenzó

La otra pata de la organización estaba en Nogoyá. Allí se inició la investigación, en abril de 2016, a partir de un estado de sospecha que tenía la Jefatura Departamental sobre un grupo de personas que se habrían dedicado a la venta de marihuana al menudeo.

A partir de las tareas de vigilancia, fotografías e intervenciones telefónicas se advirtieron movimientos compatibles con la venta de estupefacientes que realizaba Diego Orcellet, hijo del dueño de un vivero de la ciudad. A partir de allí es que los policías comenzaron a escalar hasta determinar, primero, que la droga le era proveída por Ceola; y después cómo operaban las otras células.

Lo cierto es que el nombre de Ceola surgió varios meses después.

Tras la detención del camión en San José de Feliciano, fueron detenidas cuatro personas: Orcellet, de 34 años, que sería el líder de una estructura de mediana importancia en Nogoyá; su esposa Solange Romero; la hermana de ella, Cesia Abigail Romero; y Gastón Sangoy, a quien le tercerizaban parte de las operaciones de venta al menudeo.