Vidal contrató una empresa de un represor para limpiar las escuelas

01/04/2016

Juan Cruz Varela
De la Redacción de Página Judicial

No se trata de una coincidencia ni de un homónimo: el ex militar Santiago Kelly del Moral volvió a la escena pública. Esta vez no enfrenta ninguna acusación por su rol durante la represión ilegal, sino que la polémica surge por cuestiones de negocios: el Gobierno de María Eugenia Vidal contrató a una empresa que se le atribuye para que realice la limpieza de las escuelas públicas de la provincia de Buenos Aires.

Kelly del Moral fue el creador y primer presidente de Ambientación y Paisajismo Obras y Servicios, una empresa a la que el Gobierno de la provincia de Buenos Aires le quiere abrir las puertas de las escuelas públicas, según publicó el diario Hoy de La Plata. Se trata de una sociedad que, entre otras actividades, se dedica a realizar tareas de “limpieza, conservación, mantenimiento, desinsectación o desinsectización, desratización, desinfección o fumigación y tratamiento ambiental, de higiene de áreas urbanas y/o suburbanas ya sea de jurisdicción nacional, provincial o municipal; evaluación, fiscalización y contralor de aspectos ecológicos urbanos o rurales y en relación con organismos estatales o privados, prestando los servicios acordes a cada necesidad”.

La empresa fue creada el 10 de febrero de 2006 y, según consta en el Boletín Oficial, Kelly del Moral asumió como presidente, mientras que Lilia María Bayley Bustamente fue designada como directora suplente. De acuerdo con los registros públicos, el ex militar renunció el 27 de marzo de 2007, un año después, pero coincidentemente con que su nombre empezara a sonar en los pasillos de los tribunales federales de Concepción del Uruguay por su rol durante la última dictadura.

Santiago Héctor Carlos Kelly del Moral tiene 61 años, nació el 7 de mayo de 1954 en Capital Federal y en su juventud estuvo destinado en el regimiento de Gualeguaychú. Llegó con 20 años, luego de un breve paso por Campo de Mayo, y permaneció entre el 27 de diciembre de 1974 y el 4 de diciembre de 1977. A poco de su arribo a la provincia quedó como jefe de sección en la unidad militar. En esos años pasó también por Paraná, Gualeguay, Villaguay y Ceibas, según consta en su legajo.

En democracia se recicló como integrante del reaccionario Grupo Progreso, un espacio político que alababa a Álvaro Alsogaray, según reveló hace unos años el semanario Miradas al Sur. Cuando fue citado por la justicia, no se presentó y estuvo prófugo desde el 5 de marzo hasta el 14 de octubre de 2010, cuando se presentó espontáneamente en el Juzgado Federal de Concepción del Uruguay.

A raíz de su desempeño durante la última dictadura cívico-militar en el sur entrerriano fue acusado por el secuestro de Jaime y Emilio Martínez Garbino y las torturas contra el primero de ellos en una casa operativa ubicada en inmediaciones del aeroclub.

La declaración de Jaime Martínez Garbino es contundente: “A Kelly del Moral no lo vi, no puedo hablar que reconozco su voz porque no me acuerdo su voz, porque el conocimiento que tenía de Kelly del Moral era de vista. Lo que sí dos cosas: primero lo oí nombrar claramente a él y a (el segundo jefe del regimiento, Gustavo) Martínez Zuviría y en el contexto en que lo nombraron y la forma en que lo nombraron, yo lo tuve para mí que eran los que estaban en el procedimiento ilegal que estaban haciendo conmigo. Y tuve también, si son sensaciones, lamentablemente son sensaciones, pero el que me pasó por encima y caminó arriba mío fue él (…) Eso siempre me quedó grabado”, dijo en el juicio celebrado en el año 2012.

También Emilio Martínez Garbino lo señala como uno de los perpetradores de las torturas contra su hermano, ya que aseguró haberlo visto en la casa operativa que los militares ocupaban en cercanías del aeroclub e inmediaciones del regimiento.

A pesar de esos testimonios, Kelly del Moral resultó absuelto por el Tribunal Oral Federal de Paraná y la sentencia fue confirmada por la Cámara Federal de Casación Penal y luego también por la Corte Suprema de Justicia de la Nación, a pesar de lo dictaminado por el procurador que recomendó que sea condenado.

Reciclaje PRO

La empresa Ambientación y Paisajismo Obras y Servicios, creada por Kelly del Moral y a la que ahora el gobierno bonaerense le quiere garantizar acceso a las escuelas públicas, tiene pésimos antecedentes: emitió decenas de cheques sin fondos en los últimos años, tuvo un pedido de quiebra e infinidad de denuncias por la demora en el pago de sueldos y por tener a su personal trabajando en negro. Los empleados tampoco han atravesado por ninguno de los mecanismos legales que se les exige a los auxiliares de la educación, como es concursar los cargos en actos públicos, donde además de mostrar antecedentes laborales deben acreditar idoneidad moral y falta de antecedentes penales, una cuestión esencial ya que deben interactuar con menores de edad.

Según los registros públicos, Kelly del Moral renunció al directorio en 2007 y fue reemplazado por la jubilada Lelyan Yonson. Su socia, Bayley Bustamente, siguió hasta el 27 de marzo de 2008. A partir de ese momento la empresa comenzó a cambiar de manos en forma reiterada: como presidenta quedó Susana Beatriz Aguirre, otra jubilada que actualmente tiene 80 años; y Javier Sergio Jans quedó como director suplente, hasta su renuncia, entre mayo de 2009 y julio de 2010. Entonces quedó como presidente Gustavo Amador Vosseler, que también terminó desvinculándose de la sociedad y actualmente figura como empleado de un consorcio de un edificio que se levanta en la Avenida del Libertador de la Ciudad de Buenos Aires; mientras que en el cargo de director suplente asumió Osvaldo Elías Morales.

Otra irregularidad que se ha detectado es la emisión indiscriminada de cheques sin fondos: fueron 69 en total, la mayoría entre julio de 2015 y marzo de este año.

Esto no fue óbice en la relación con el PRO.

A principios de 2008, el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, que encabezaba Mauricio Macri, la empresa fue contratada, en el marco del “Programa para el Saneamiento Integral de Villas”, para realizar las tareas de barrido, higiene, colocación de desperdicios en contenedores, fumigación y eliminación de plagas, en los pasillos, descampados y periferia de las villas de la ciudad. Para esa tarea también fueron contratadas otras dos empresas. Una de ellas, Sarsu SRL, casualmente, tiene entre sus fundadoras a las jubiladas Aguirre y Bayley Bustamente, la socia de Kelly del Moral.