El médico Moyano seguirá detenido

31/12/2015

De la Redacción de Página Judicial El médico Hugo Mario Moyano continuará detenido. El juez federal Leandro Ríos le denegó la excarcelación y prorrogó por un año más la prisión preventiva de Moyano, condenado la semana pasada por crímenes de lesa humanidad cometidos durante la última dictadura cívico-militar. De la Redacción de Página Judicial El


De la Redacción de Página Judicial

El médico Hugo Mario Moyano continuará detenido.

El juez federal Leandro Ríos le denegó la excarcelación y prorrogó por un año más la prisión preventiva de Moyano, condenado la semana pasada por crímenes de lesa humanidad cometidos durante la última dictadura cívico-militar.

Moyano había solicitado su excarcelación en el marco de la causa denominada Área Paraná II, un desprendimiento del expediente principal, en la que está imputado por la imposición de severidades, vejaciones y apremios ilegales en perjuicio de una víctima que se encontraba detenida en la cárcel de mujeres.

El médico había presentado un escrito pidiendo su excarcelación luego de que se conociera la sentencia en la megacausa Área Paraná, donde fue condenado a ocho años de prisión como partícipe necesario de las torturas que sufrieron cuatro presos políticos en centros clandestinos de detención. Dado que llevaba seis años y medio detenido, desde el 5 de junio de 2009, Moyano estaría en condiciones de acceder a la libertad condicional por haber cumplido ya dos tercios de la condena. La pena se agota el 5 de junio de 2017.

Esta decisión del juez descarta esa posibilidad, al menos por ahora.

La medida va en consonancia con lo solicitado por los fiscales Mario Silva y Carlos García Escalada y uno de los argumentos fue que los delitos que se investigan han sido perpetrados en el marco del terrorismo de Estado y en perjuicio de numerosas víctimas.

La causa Área Paraná II comenzó a tramitarse a partir del 5 de mayo de 2012, tras la clausura del expediente principal. Se investigan secuestros y torturas contra 22 ex detenidos políticos cometidos en 1976 y 1977, entre ellos, el caso del soldado Jorge Emilio Papetti, secuestrado y desaparecido en marzo de 1976.

De los relatos de los ex presos políticos surge que eran retirados de la cárcel de Paraná y trasladados al centro clandestino de detención que funcionó en el Batallón de Comunicaciones, a una casa de torturas que había en cercanías de la Base Aérea o dentro mismo de la unidad penal, donde también eran sometidos a tormentos. La presencia de Moyano ha sido señalada con frecuencia en esos lugares e incluso en los libros de guardia del Servicio Penitenciario constan también las salidas de los detenidos políticos para ser atendidos en el Hospital Pasteur, donde trabajaba Moyano.

En el plenario de la megacausa Área Paraná, Mariana Fumaneri, ex detenida política, contó que estando en la cárcel, una compañera de cautiverio, Gloria Tarulli, debió ser atendida por una descompostura. El médico de la unidad penal era Moyano, a quien Fumaneri describió como un hombre alto, bien peinado y con “olor a limpio”, como si acabara de salir de la ducha. “Sentí que era la misma persona” que la había revisado mientras la torturaban en los calabozos del Escuadrón de Comunicaciones del Ejército.

Por las torturas que sufrió Tarulli es que Moyano continúa detenido.

En la sentencia, el juez Ríos consideró que “los testimonios ubican a Moyano como un activo colaborador en las prácticas ilegales que llevaban a cabo las fuerzas conjuntas en esta ciudad de Paraná en el marco de la lucha contra la subversión”. Destacó además que la presencia de Moyano “en las unidades de detención se hallaba lejos de obedecer a una razón humanitaria como tampoco a una respuesta al compromiso hipocrático asumido”, sino más bien obedecía a que “su accionar conformaba parte fundamental dentro del mecanismo de interrogatorios bajo inflicción de tormentos que se desarrollaba en razón del plan sistemático de represión”.

En la causa Área Paraná II, además de Moyano, están procesados José Anselmo Appelhans, Jorge Humberto Appiani, Rosa Susana Bidinost, Alberto Rivas –también condenados en la megacausa–, Naldo Miguel Dasso –condenado a prisión perpetua, con sentencia firme, por crímenes de la dictadura en Concordia–, Gonzalo López Belsue y Guillermo Quintana, este último en libertad.

La instrucción de esta causa está a punto de ser clausurada –ya se ha agotado la producción de pruebas y resta que la Cámara Federal de Apelaciones resuelva algunos incidentes–, por lo que la causa podría pasar a la etapa de plenario en 2016.