Mayer, el juez que se jacta de que su hija canta la marchita

04/02/2019

El juez de Garantías que estuvo en el centro de la polémica cuando hizo lugar al habeas corpus que excarceló a Juan Pablo Aguilera utilizó su perfil de Facebook y explicitó sus simpatías políticas. No es la primera vez que sucede en un magistrado de esta provincia. Se utiliza la red social y se viola una ley, pero en todos los casos se diluyeron con el tiempo. Tres episodios que muestran la total crisis institucional en donde todo pasa.

Federico Malvasio

De la Redacción de Página Judicial

 

No es para escandalizarse. En rigor sí. Pero las cosas que pasan en el Poder Judicial se naturalizan de una manera asombrosa.

El nombre de Marcelo Mauricio Mayer tomó relevancia a fin de año cuando hizo lugar a un habeas corpus presentado por la defensa de Juan Pablo Aguilera y, en una jugada magistral, la Sala de Procedimientos Constitucionales y Penal del Superior Tribunal de Justicia (STJ)  derivó el caso sin resolver al juez de Garantías para dejar al cuñado de Sergio Urribarri fuera de la Unidad Penal durante las Fiestas. Después sí se resolvió la cuestión como lo establece el procedimiento.

Mayer utiliza su perfil de Facebook para expresar sus ideas políticas, que está bien que las tenga, pero mal que las exprese públicamente. Por la sencilla razón de que no se lo permite la ley. “De tal palo tal astilla. Canta muy bien la marchita”, posteó el magistrado con la foto de su hija, quien aparece con los dedos en V.

En otros post deja expresado también su admiración, por ejemplo, por Evita.

No sería lo más vergonzoso de Mayer. Fue uno de los nombres que eligió Jorge Busti para integrar la Oficina Anticorrupción y Ética Pública, un organismo que se ocupó de ponerle la lápida a la Fiscalía de Investigaciones Administrativas y no continuar ninguna de las investigaciones que estaban en curso. De allí emprendió su carrera judicial titularizando en el entonces Juzgado de Instrucción Nº2 de Paraná en el Consejo de la Magistratura.

Antecedentes

La conducta de Viviana Edith Murawnik iba a ser analizada por el Jurado de Enjuiciamiento por haberse expresado políticamente por un partido, cuestión penada para un funcionario judicial en el artículo 15, inciso 6, de la ley 9283.

La titular del Juzgado del Trabajo Número 2 de Paraná también mostró en su perfil de Facebook una boleta de la alianza Cambiemos. Esto motivó la reacción de cinco vocales. Claudia Mizawak, Susana Medina de Rizzo, Germán Carlomagno, Juan Ramón Smaldone y Miguel Angel Giorgio denunciaron que las publicaciones de Murawnik “trascendieron de la esfera privada y llegaron al conocimiento del público en general” y allí, en esa oportunidad, se la vio “propiciando y/o invitando a votar por ese signo político”, es decir a Cambiemos. También se la acusa de haber incurrido en “la satarización de otras agrupaciones políticas”.

¿Qué sucedió? Nada. Se sigue desempeñando como jueza.

La fiscal auxiliar de Federal Eugenia Ester Molina dejó trascender públicamente sus ideas en su perfil de Facebook. En este caso con repudiable tinte discriminador. “Hay una gran diferencia entre lo que es una persona de color y un negro de mierda”; “Hijo de Don Piketero y Doña Planera, nieto de Peronia y alumno de Baradel. En una palabra, está frito el pibe”. Esas fueron las palabras de la integrante del Ministerio Público Fiscal. Virilizado el escandaloso post, la doctora no pudo llegar a la audiencia prevista ante la Comisión de Asuntos Constitucionales del Senado para acceder al Juzgado de Garantías de Federación. Horas antes presentó una nota en la que anunció que se ausentaría por cuestiones de salud. El Inadi había dado su veredicto en un dictamen muy duro. Molina sigue como fiscal auxiliar.

En 2007, el actual presidente del STJ, Emilio Castrillón, condujo un programa de radio en La Paz, de donde es oriundo, mientras se hacía la cobertura de las elecciones. Al aire saludaba los números favorables al peronismo oficialista. Hubo una presentación de juicio político con la firma de los abogados Juan Antonio Llorens; María Ema Bargagna, Santiago Reggiardo, Raúl Avero, Leandro Dato, Guillermo Mulet, Senen Mario Gutiérrez, Guillermo Vartorelli, Mirko Otalora, Juan Alberto Aceval, Juan Martín Pagola, José Iparraguirre, Martín Pita, Enrique Máximo Pita, Rubén Pagliotto, Emanuel Martínez Garbino, Jaime Martínez Garbino, Francisco Alberto Haimovich, Marta Brodsky de Petric, Jorge Ricardo Petric, Carlos Enrique Jozami, Jorge Mumare, Amado Siede, Jorge Leitner e Iván Vernengo, entre otros. Se desestimó.